jueves, 13 de diciembre de 2012

BIOLOGÍA


Un proceso de fermentación de la Primera Guerra Mundial podría servir ahora para elaborar biocombustibles

Con el paso del tiempo, muchas tecnologías quedan obsoletas y caen en el olvido. Pero a veces, alguna de ellas, o de otras que se quedaron encasilladas en aplicaciones añejas, encuentra nuevos usos y vuelve rejuvenecida al primer plano de la actualidad.

Ahora, puede haberle llegado el turno a un proceso de fermentación que en la Primera Guerra Mundial se usó para fabricar cordita (una pólvora sin humo) destinada a munición.

Unos investigadores del Laboratorio Nacional estadounidense Lawrence Berkeley (Berkeley Lab), en California, han combinado este antiguo proceso de fermentación para la elaboración de explosivos, con una nueva catálisis química, a fin de que sirva en la producción de biocombustibles avanzados.

Usando la bacteria Clostridium acetobutylicum, el equipo del químico Dean Toste, del Berkeley Lab y también de la Universidad de California en Berkeley, fermentó los azúcares presentes en un tipo de biomasa, dando lugar al disolvente acetona y a los alcoholes butanol y etanol.
A continuación, catalizó con paladio estos productos, obteniendo hidrocarburos de mayor masa molecular, capaces de servir como precursores de los tres principales combustibles usados en medios de trasporte, que son la gasolina, el gasóleo y el combustible para avión a reacción. El tipo específico de precursor producido (el de la gasolina, el del gasóleo o el del combustible para avión a reacción) estuvo determinado por la cantidad de tiempo que esos tres citados productos iniciales (acetona, butanol y etanol) permanecieron con el catalizador de paladio.

Gracias a la remodelación de la técnica centenaria, el método permite obtener aproximadamente un litro de combustible a partir de unos dos kilogramos de los azúcares procedentes de biomasa lignocelulósica.

En el trabajo de investigación y desarrollo también han intervenido Harvey Blanch, Douglas Clark, Pazhamalai Anbarasan, Zachary Baer, Sanil Sreekumar, Elad Gross y Joseph Binder.

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